UN CUENTO DE SOBRE UN HOMBRE BUENO
Domingo 13 de octubre.
Todo "ujú";
es decir, "maravilloso".
Que, ¿Cómo va todo?
¿Todo va bien?
"Ujú".
Así, como va,
va bien.
Y, si como fuera,
igualmente:
"Ujú".
Y, el Evangelio del día
decía, que:
-- En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino,
--- se le acercó uno corriendo,
se arrodilló y le preguntó:
-«Maestro bueno,
¿qué haré para heredar la vida eterna?»
Jesús le contestó:
-«¿Por qué me llamas bueno?
No hay nadie bueno más que Dios.
Ya sabes los mandamientos:
- no matarás,
- no cometerás adulterio,
- no robarás,
- no darás falso testimonio,
- no estafarás,
- honra a tu padre y a tu madre.»
Él replicó:
-- «Maestro, todo eso lo
he cumplido desde pequeño.»
Y, es, que,
aquel hombre era un hombre bueno.
Primero, trata con dulzura
y bondad a Jesús,
al llamarlo "maestro bueno".
al llamarlo "maestro bueno".
Solo los que son buenos
reconocen en otros
la bondad, lo bueno;
porque, transpiran bondad,
y así tratan.
Segundo:
Aquel hombre,
que era bueno,
cumplía todo lo
que Jesús le recordó
como norma de vida:
-- Y, se sabía bueno:
-- "todo eso lo he cumplido".
Es, que,
era bueno.
-- ¡Guao!
-- !Interesante!
Y, colorín-colorado;
este cuento se ha acabado.
Fin
No hay comentarios:
Publicar un comentario